El trabajo de sanación del niño interior herido, desvela a veces una dolorosa historia infantil reprimida, la cual una vez sacada a la luz, comprendida, aceptada, abrazada, y finalmente sanada, acaba con la necesidad de temer y repetir inconscientemente lo que les ocurrió en su más tierna infancia, porque ahora conoce la realidad de aquella edad y pueden reaccionar a ella con rabia y con tristeza en presencia de su Ser que hace de guía en este proceso.
A medida que vamos avanzando en
la aceptación de nuestro pasado, dejamos de despreciarnos, de culparnos y hacernos
daño mediante todo tipo de adicciones, porque vamos desarrollando un nuevo
vínculo con el niño que sufrió gravemente a causa de la conducta de sus padres.
Cuando éramos niños y las cosas
iban mal, solíamos pensar que algo no funcionaba bien en nosotros, que teníamos
algo malo dentro. Los niños piensan que si pudieran hacer las cosas bien, sus
padres lo amarían y nos lo castigarían, ni pegarían.
Cuando el niño desea algo y no
lo obtiene, piensa que no vale lo suficiente, que no es normal, es un tonto,
entonces, cuando nos hacemos mayores rechazamos ciertas partes de nosotros
mismos, y a esas partes hay que aceptarlas completamente. Cuando cumplimos los
5 años más o menos nos desconectamos, pensamos que algo no funciona bien en
nosotros y ya no queremos tener nada que ver con ese niño o niña que somos.
¿Y que podemos considerar una herida? Pues
todo tipo de humillaciones, golpes, traiciones, abusos sexuales, burlas,
desatenciones, entre otras. Dañan la
integridad y dignidad de un niño, aunque sus consecuencias no sean visibles
inmediatamente.
Esos niños que han sido
maltratados se protegen mediante el olvido. El niño que crece en un entorno
abusivo tiene prohibido expresarse a sí mismo y expresar su rabia.
Como soportar ese dolor a solas
es demasiado duro para el niño, se ve forzado a olvidar sus sentimientos, a
reprimir los recuerdos traumáticos y a idealizar a quienes son realmente los
autores de esos abusos.
Aprenden a no recordar como
medida de defensa. Y todas esas experiencias traumáticas que se reprimen,
encuentran su forma de expresión en el cuerpo, se almacenan en el cuerpo. De
forma inconsciente, la tensión se acumula y tarde o temprano sale a la luz en
forma de angustia, ansiedad y síntomas.
Los nuevos
patrones.
Todos los sucesos que tu niño a vivido y lo han marcado, generando un
daño, queda registrado en tu inconsciente, como un programa, en donde, este
programa se activa cuando estás por vivir una experiencia similar o simplemente
tienes la sensación, a la que vivió tu niño la primera vez que fue cuando se
grabó dicho programa.
Y es tu niño herido, en estas circunstancias, quien actúa o toma
decisiones para tu futuro. El trabajo consiste en romper esos programas
haciendo que tu niño pueda expresarse de forma natural, es dejarlo ser, cosa
que no pudiste vivirlo en tu infancia, ya sea por padres violentos,
hostigadores, irresponsables, etc.
Y está en ti, en generar los nuevos patrones, haciendo la parte que
corresponde para, llegar a ese objetivo, por ejemplo: abandonar las cosas que
no te satisfacen, las relaciones que no llevan a ninguna parte, mala
alimentación, y empezar a crear ambientes más seguros, en la cual puedas
expresar tu sentimientos tranquilamente, que te dan placer.
La experiencia del niño que tenemos
dentro es infinita, está enterrada, pero necesita mucho amor para salir y
seguridad para su crecimiento y curación. Hay que dejar que nuestro niño se
exprese, y haga todo lo que en el pasado no pudo hacer. Si tu niño necesita
reír, llorar y gritar para dejar que los nudos de tensión salgan de su cuerpo
hay que hacerlo.
Crear tu segunda infancia es tu tarea, ya no dependes de nadie, ni de
tus padres, ni amigos, ni nada, es tu responsabilidad de ahora en adelante,
tendrás que aprender a tratar, a contener, escuchar, y a jugar con tu niño
interior.
Tal vez no quieras verlo al principio y te resistas,
volviendo a viejos patrones limitantes y que hacen que te olvides temporalmente
de tu niño interior, porque sientes culpas por romper esos patrones que fueron
lo pilares de tu niñez. Cuando ello ocurra debes hacer un gran esfuerzo y amar
a tu niño para que no vuelva a sus caminos dolorosos y a aprender que tienes el
control de la situación. El camino hacia el Amor es decirle que merece que ser respetado,
ser amado y tener toda la confianza en él. Saber que aunque en la primera
infancia no tuviste elección, y que ahora SI que la tienes.
-Ejercicio:
Busca un lugar cómodo, donde te puedas sentar o tumbar,
como prefieras, cierra los ojos, empieza a respirar suavemente, siente como el
aire entra y sale por la nariz, entra por tu nariz luz y amor divino, y salen
por tu boca todos los miedos y bloqueos que hay en el cuerpo, se renueva poco a
poco toda tu energía, se va marchando la tensión acumulada. Si algún
pensamiento te interrumpe, es normal, déjalo pasar y sigue centrado en la
respiración.
Empieza a sentir los párpados pesados, muy pesados, te
cuesta tener los ojos abiertos, las mandíbulas nos pesan, se aflojan los
músculos de la frente, mueve un poco el cuello, lo relajamos, se van aflojando
los hombros y sientes como se dejan caer, se aflojan los brazos, los músculos
abdominales, el vientre, se relajan las piernas, todo nuestro cuerpo esta
relajado y te sientes muy bien.
1_Ahora estas
descansando en plena oscuridad, y en medio de esa oscuridad aparece una
pantalla de cine, estas relajado y sin apuro, vas a ver aparecer en ella
imágenes de tus primeros días en la escuela, pueden ser una o varias imágenes,
no importa cuales, vas a ver a tu mejor amigo de ese momento, recordamos a
algún vecino, o maestro, o seño, te sientes seguro y a salvo, y fluyendo en esta
experiencia, tienes el control de la misma en todo momento, si alguna imagen te
molesta simplemente la dejas ir.
2_Vas a ver la casa
en la que vivías antes de ir a la escuela, ¿de que color era la casa? ¿Era un
departamento pequeño o grande? ¿Era en la ciudad? ¿Había plantas?
Ahora puedes ver las habitaciones de la casa, las que recuerdas,
cuando estabas en esa casa ¿tenías alguna habitación especial? ¿En donde pasabas
la mayor parte del tiempo? ¿Dónde estaba la mesa del comedor? Observa quien esta sentado a la mesa. ¿Qué sentías
cuando estabas sentado en esa mesa? ¿Qué sentías al vivir en ese casa? Recréate
en las imágenes que vengan, explore, sin miedo.
3_Ahora, recuerdas
la casa en la cual vivió tu familia cuando viniste al mundo, imagina el cuarto
donde te dormías justo después de tu nacimiento, observa que bebé tan hermoso
eras, escucha tu voz cuando balbuceábamos, reías o llorabas.
4_Ahora, lentamente
vas a ver como tú mismo entras en la escena y cargas a ese hermoso bebé, lo
contienes y acunas, estas presenciando tu propia infancia, ¿Quién más está ahí?
¿Tu mamá? ¿Tu papá? ¿Tus abuelos? ¿Parientes? ¿Qué se siente al haber nacido en
esa casa y con esas personas?
5_Ahora imaginas que tu eres somos ese
bebé, en ese momento, observas todo lo que esta pasando a tu alrededor, sientes
la presencia de una persona que te ama, eres ese bebé y comienzas
a ver como todo se tiñe de una luz violeta claro, vas a ver todo a través de
esa luz violeta, sientes que te toman en brazos con mucho amor y en medio de
esta paz y seguridad, escuchas como te dicen dulcemente:
“Bienvenido
al mundo, te hemos estado esperando”
“Nos alegra
mucho que estés aquí”
“Te hemos
preparado un lugar especial para que vivas, junto a nosotros”
“Te amamos
tal como eres”
“No te
abandonaremos pase lo que pase"
“Comprendemos
tus necesidades”
“Te
dedicaremos todo el tiempo que necesites”
“Nos alegra
mucho que seas un niño o niña”
“Queremos
cuidarte y estamos dispuestos a hacerlo”
“Nos gusta
alimentarte, bañarte, cambiarte los pañales y pasar tiempo contigo, eres un ser
muy especial”
“En todo el
mundo, nunca ha habido otro bebe como tu”
“Dios sonrió
cuanto NACISTE”.
1_Deja que tus
sentimientos fluyan al escuchar estas frases.
2_Ahora, permite
que tu adulto se ponga donde estabas.
3_Escucha cuando
dice que nunca te abandonará, ahora sientes que en lo sucesivo siempre podrás
contar con él, quédate un instante con esta sensación de seguridad y amor tan
profundos.
4_Lentamente te
conviertes de nuevo en adulto, mira a los ojos a tu precioso bebé, percibe que
acabas de recuperarlo, disfruta la sensación de esa bienvenida a casa. Ese
pequeño niño es bienvenido, amado y protegido por ti y nunca estará solo otra
vez.
5_Vas a salir de
ese cuarto, de esa casa, mirando hacia atrás, y mientras te alejas caminando,
caminas lejos, viendo como se queda atrás tu primera escuela, y también dejas
tus años de adolescencia, recuerdas cuando te convertiste en adulto, ahora
caminas hacia donde estás en este momento, al presente.
6_Tomas conciencia
de los dedos de los pies, los mueves, percibís la energía a través de tus
piernas, en tu pecho mientras inhalas profundamente y exhalas ruidosamente,
sientes la energía en tus brazos, dedos, hombros cuello y cabeza.
7_Mueves un poco el
cuerpo, estiras los brazos, te concentras en el presente y vas abriendo los
ojos suavemente.
8_Anota en un
cuaderno los sentimientos que surgieron durante el trabajo, para luego
reflexionar sobre ellos.
9_Toma consciencia
del adulto que eres hoy en día y como puedes cuidar del pequeño niño que llevas
dentro.
Publicar un comentario