miércoles, 13 de mayo de 2020

Un nuevo nivel de Consciencia

Si aprendiéramos a vivir desde nuestro Ser, veríamos que la parte más valiosa y luminosa de nuestro Ser está conectada con todos los ritmos del Universo. Seríamos conscientes de nuestra capacidad de hacer milagros. Dejaríamos de sentir temor, añoranza, odio, ansiedad y duda.


Vivir desde el nivel del Ser, significa dejar atrás al ego y las limitaciones de la mente que nos atan a los sucesos y consecuencias del mundo físico.


Pero en la práctica no nos sentimos desde los niveles superiores, nuestros sentidos nos confirman que estos cuerpos son reales y tenemos pensamientos personales e individuales. ¿Cómo es que no podemos sentir o ser conscientes de su existencia? Y ¿Por qué sentimos que nuestras vidas son tan limitadas, escasas y en algunos casos insostenibles? 

Cuando aprendemos a dirigir nuestra consciencia hacia adentro, el tiempo suficiente, empezamos a tener destellos de una presencia en nuestro interior,  con la práctica y el desarrollo suficiente la conexión se hace más fuerte, alcanzando un estado de realización constante.


El estado de realización es el poder para manifestar tus deseos, es la fuerza que le inyectas a tu pensamiento para manifestar lo quieres en tu realidad, es un estado de consciencia y de iluminación interior. Es este estado que te abre las puertas para tu manifestación.


Para iniciar este proceso puedes trabajarlo de la siguiente manera:

Pregunta: ¿Quién soy yo? Y luego, deja ir la pregunta, que caiga al vacío, no recurras a nadie. Guarda silencio y profundiza en tu ser. Deja que la pregunta resuene en tu interior, no verbal, sino existencialmente. Permite que la pregunta te penetre como una flecha te atravesaría el corazón. ¿Quién soy yo?, y repite la pregunta, suavemente y quédate en la expectativa. 


No tengas prisa por encontrar la respuesta, porque si la encuentras, te la habrá dado otra persona, el cura de tu iglesia, un conocido, o una tradición. No respondas con la memoria, porque toda tu memoria es algo prestado. Tu memoria es como un ordenador, algo muerto. La memoria no tiene nada que ver con el conocimiento. La memoria es como el programa del ordenador, de modo que cuando preguntas: ¿Quién soy yo?, y la memoria contesta: Eres una gran alma, ojo. No caigas en la trampa.


Sigue preguntando: ¿Quién soy yo? ¿Quién soy yo? ¿Quién soy yo? Como un mantra, y un día verás que también la pregunta se ha desvanecido. Solo queda un ansia: ¿Quién soy yo?, pero solo esa ansia, no la pregunta.


¿Quién soy yo?, mientras todo tu ser vibra con ese anhelo. Y un día lo verás, que solo existe el ansia. Y en ese estado de apasionamiento, tan intenso, de pronto te darás cuenta de que algo ha estallado. De repente te verás cara a cara contigo mismo y sabrás quién eres.


(Bueno, hasta aquí he tratado de darte la información para, que generes nuevas estructuras y ellas te llevan a una expansión y un cambio de consciencia).

Publicar un comentario

Whatsapp Button works on Mobile Device only